MARMAS Y YOGA. SEMILLAS DE CONCIENCIA PARA EL FLUJO DEL PRANA
Cuando realizamos extensiones atrás en Yoga habremos oído muchas veces, “no comprimas la zona lumbar”, “extiéndete desde el pecho”, “separa las clavículas”, etc. La función de las extensiones atrás desde el punto de vista musculo-esqueletal es favorecer la movilidad en la zona dorsal del cuerpo, menos móvil por la presencia de la caja torácica y cuya curva (cifosis) es contraria a la de la extensión atrás. Personas con hiperlordosis lumbar suelen tener tendencia a extenderse atrás favoreciendo aún más curva en la zona lumbar y dejando casi sin “trabajar” la parte superior del cuerpo. A la larga, esto puede desencadenar en contracturas del cuadrado lumbar, síndrome facetario o de las carillas articulares, hernias anteriores, etc.
Trabajar el alineamiento postural considerando la anatomía energética del Ayurveda nos abre un mundo de posibilidades magníficas para mejorar nuestra práctica y sea más apta para nosotros. Dentro de esta anatomía energética encontramos los Chakras, los Nadis y los Marmas. Los marmas son zonas o puntos del cuerpo similares a los puntos de acupuntura, puntos de reflexología o puntos gatillo a través de los cuales podemos actuar sobre el prana. Según el Ayurveda, dominando el prana se consigue la inmortalidad del alma y esto lo conseguimos influyendo en nuestros canales energéticos (nadis) mediante el trabajo mental, respiratorio y físico (presión o estiramiento) en los marmas.
El modo de trabajo en los marmas según AyurYoga® depende de si la persona tiene un desequilibrio Vata, Pitta o Kapha ya que para cada uno de ellos encontramos dolores y sensibilidades diferentes. En el caso de Kapha, por ejemplo, encontraremos sensación de debilidad, frío y humedad en la región con palidez, depósitos de grasa, congestión, edema y dolor sordo. Para mejorar la energía en ellos debemos aportarles calor y sangre mediante la tonificación muscular. Para este dosha, las extensiones atrás son ideales ya que activan el s. nervioso simpático ayudándole a salir de su letargo y su pereza. Un ejemplo de extensión es la postura de la foto, Camatkarasana, en la cual tonificamos y activamos marmas posteriores. Krikatika se localiza en la unión del cuello con el Occipital y fortalecerlo aumenta el riego sanguíneo y el ascenso de Udana Vayu. Amsaphalaka localizado en el extremo interno de la espina de la escápula mejora la circulación del sistema respiratorio y cardiovascular por lo que nos oxigena y revitaliza. Brihati activa la función del hígado y del sistema linfático mejorando la circulación (Vyana Vayu), Katikatarunam en el glúteo influye en la posición de la pelvis y nuestra postura en general además de influir en los órganos pélvicos (riñones, intestino grueso, ovarios, etc.). Kukundara, en la articulación sacroilíaca mejora los dolores lumbo-sacrales e influye al igual que el anterior en los órganos pélvicos. Guda influye en Apana Vayu y Alambusha Nadi descendiendo la energía y los movimientos corporales (nos ayuda a enraizar).
En una clase de Yoga para los Marmas de AyurYoga® describimos un pequeño grupo de marmas para llevar la atención y la respiración a ellos. Esto nos permite influir en zonas muy localizadas desde donde partir para mejorar nuestra postura. Con estas semillas de atención favorecemos la circulación energética y el prana.
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Dra. Helena Chacón Muñoz